Un arquitecto front-end necesita una combinación de habilidades técnicas, empresariales y blandas para sobresalir en su función. Desde un punto de vista técnico, deben tener competencia en HTML, CSS y JavaScript, así como en marcos modernos como React, Angular, Vue y Bootstrap. También deben estar familiarizados con las herramientas y flujos de trabajo de desarrollo front-end, como editores de código, control de versiones, empaquetadores, preprocesadores, compiladores, transpiladores, linters y más. Además, es esencial tener experiencia en herramientas y técnicas de depuración y pruebas de front-end. La comprensión de los métodos y métricas de optimización del rendimiento del front-end también es esencial para el éxito. Además, deben conocer los estándares y las mejores prácticas de la web front-end, como el diseño receptivo, la accesibilidad web, la compatibilidad entre navegadores, el SEO y más. Desde el punto de vista empresarial, deben ser capaces de traducir los requisitos empresariales y de usuario en especificaciones funcionales y técnicas. También deben estar familiarizados con los conceptos y marcos de la arquitectura empresarial, como los modelos de negocio, las propuestas de valor, los segmentos de clientes, los flujos de valor, etc. Por último, los arquitectos front-end necesitan habilidades blandas como las habilidades de comunicación para articular la visión de la arquitectura a diferentes audiencias; habilidades de colaboración para trabajar eficazmente con otros arquitectos; habilidades de liderazgo para inspirar al equipo de desarrollo; habilidades de resolución de problemas para identificar desafíos de arquitectura; y aprender habilidades para mantenerse al día con la evolución de las tecnologías.